A través del consumo de leche se puede favorecer a una buena salud ósea, ya que es una buena fuente de calcio, vitamina D y K. El calcio es responsable de mantener la fuerza y la densidad de los huesos. Juega también un papel importante en la protección contra el cáncer de colon y mama, además de mejorar la densidad ósea durante la menopausia.